viernes, 23 de noviembre de 2012

¿SERÁ NECESARIO CREAR UNA NUEVA CIRCUNSCRIPCIÓN PARA ENFRENTAR LA SITUCIÓN DE POBREZA EN LA CUAL VIVE LA POBLACIÓN DE LORETO?

Revisando las más recientes estadísticas oficiales sobre la situación de la pobreza en el Perú, entre ellas las de Loreto. Sus fuentes incluyen estimaciones y proyecciones de población por sexo, según departamento, provincia y distrito, entre los años 2000 y 2015. Además, el mapa de la pobreza distrital del INEI del año 2009, la evaluación censual de estudiantes del Ministerio de Educación del año 2010, el mapa de desnutrición crónica de los niños del INEI, del año 2009, así como el censo nacional de población y vivienda del INEI (2007) y datos de la Dirección General de Electrificación Rural del 2010.
Los resultados confirman que Loreto es una de los departamentos más pobres del país y, además, que los niveles de desigualdad entre regiones son bastante marcados. Estos son bastante demostrables con los desagregados por provincias y distritos. El centralismo iquiteño y el abandono casi negligente y delictivo de algunas zonas resultan alucinantes.
 
Por citar ejemplo claro: la tasa provincial de desnutrición crónica oscila en alrededor del 31% promedio regional, mientras los casos de mortalidad infantil están entre 24 y 35 por cada mil niños. Las estadísticas educativas son brutales. El nivel adecuado de comprensión lectora apenas llega a 9.9% en Maynas y se desploma hasta 3.7% en Datem del Marañón. En comprensión matemática, otra vez, el Datem del Marañón logra niveles de espanto, con solo un 1.1%. Esta última provincia en mención, fue creado por ley N° 8593, de fecha 02 de agosto del 2005, con su capital San Loreszo; han pasado más de 7 años desde su creación y justamente su creación fue debido a su ubicación en zona de froterá política, donde la pobreza era y lo es más aún en la actualidad; la creación provincial se justifcaba porque de esa manera se aseguraba la presencia del Estado con toda sus instituciones de manera integral; sin embargo, hoy Datem del Marañón sigue siendo una de las provincias más pobres del país y de seguro lo seguirá siendo, sino existe una intervención de parte del Estado que logre revertir dicha situación. La pregunta del millón es, ¿valió la pena ser creado como provincia? la respuesta cae por su propio peso, No; entonces porque ahora el Gobierno Regional Loreto pretende crear la provincia del Putumayo, justificando lo anterior, si está demostrado que la creación de una nueva circunscripción no soluciona este problema en el país, sino mas bien son intereses político creado, a fin de crear falsas expectativas en la problación.




 

miércoles, 21 de noviembre de 2012

LA INCONVENIENCIA DE CREAR DISTRITOS EN EL PAÍS


La creación de una nueva circunscripción en el país, pasa por hacer un análisis y sustento en base al Reglamento de la Ley N° 27795, aprobado mediante D.S. N° 019-2003-PCM; que desarrolla los principios, definiciones, procedimientos, requisitos y criterios técnico-geográficos en materia de demarcación territorial, así como los lineamientos del proceso de saneamiento de límites y organización territorial contemplados en la Ley N° 27795. Al respecto,técnicamente les presento un análisis de ventaja y desventaja por qué no es conveniente seguir creando más circuncripciones en el Perú:

VENTAJA
  • La población de un hipotético distrito a crearse, tienen la expectativa de mejorar su calidad de vida al convertirse en una nueva circunscripción; como distrito, los habitantes tendrá acceso a mejores servicios y bienes públicos. Ello permitiría desconcentrar su dependencia de su capital distrital actual, incrementando su presencia institucional en todo el ámbito propuesto.


DESVENTAJA
  • La creación de un nuevo distrito, generará controversia por límite territorial dentro del ámbito propuuesto y sus distritos vecinos al momento de hacer la delimitación de la nueva circunscripción ya que generará expectativa en la población en querer pertenecer al nuevo distrito o mantenerse en su distrito de origen. Asimismo, por las características geográficas del territorio son tan diversas que se podrían generar problemas de identidad porque se perdería la vocación original del territorio que da origen al nuevo distrito; del mismo modo, alguno de los distritos de la provincia del cual se desagrega perdería su carácter de limítrofe con otro distrito al crearse nueva la entidad territorial.
  • La creación del nuevo distrito por estar muy cercano a la ciudad capital de provincia o departamental, significaría la concentración de la mayor parte de la infraestructura institucional y administrativa en dicha ciudad, lo que dificultaría la ampliación de servicios para el mejoramiento de la calidad de vida de la población y un gran esfuerzo fiscal por parte del hipotético distrito para la consolidación de la institucionalidad municipal, en sacrificio de la inversión social que hoy reclama la población para la atención de necesidades básicas insatisfechas. Con la escisión, la ciudad predominante concentraría la mayor capacidad de gestión por su fortaleza institucional (instituciones del Estado, asociaciones, gremios, sector financiero, y otros, etc.) contrario a la débil capacidad de gestión con la que contaría el hipotético distrito, lo que representaría un riesgo para el potencial desarrollo económico y social de dicho ámbito territorial.
  • Tratandose de propuesta de creación distrital dentro del ámbito de departamentos pobrez del país, tomando como referencia el Mapa de Pobreza del INEI, 2007. En ese sentido, existen 993 distritos más pobres del Perú; estos datos no sólo se relaciona con la carencia de ingresos monetarios de la población sino también con la privación a derechos de salud, educación, adecuada nutrición, acceder a agua y saneamiento y vivir en un entorno que les permita ampliar sus capacidades para mejorar sus bienestar; sin embargo, la creación de un nuevo distrito en lugares muy pobres no es pertinente, porque se produce la fragmentación del territorio, no garantiza el desarrollo de la población sino mas bien genera la atomización de los recursos públicos que el Gobierno Central distribuye a los gobiernos locales, gobiernos regionales y otras entidades beneficiarias, impidiendo la realización de proyectos de inversión pública de impacto local y regional.
  • La creación de un nuevo distrito implica un costo para el Estado, debido a que ocasiona el aumento del gasto destinado al funcionamiento de estas nuevas entidades públicas, un mayor gasto administrativo al tener que contratarse o designar un número de personal para estas nuevas entidades (nuevos servidores públicos) y a su vez, la infraestructura necesaria para su funcionamiento.

CONCLUSIÓN
Por las consideraciones expuestas, es inconveniente la creación de nuevo distrito en el país. Cabe precisar, que los requisitos que establece el reglamento de la presente ley N° 27795 no es un simple cumplimiento de requisitos formales o de condiciones mínimas para funcionar administrativamente, la ley, su reglamente y las recomendaciones técnicas, se precisa que la razonabilidad de la creación de un nuevo distrito debe estar fundamentada en el verdadero mejoramiento de la calidad de vida de la población, garantizando de manera sostenible la prestación de los servicios públicos necesarios y la solución de las problemáticas socioeconómicas de la población en su conjunto.

viernes, 15 de junio de 2012

PROBLEMA DE LA ADMINISTRACIÓN DEL TERRITORIO POR UN GOBIERNO LOCAL

Un alto grado de fragmentación político-administrativa, que dificulta la gran inversión pública y el manejo territorial con enfoque de cuenca. La ausencia de instituciones y actores sociales que regulen el acceso y uso a los recursos naturales, así como la ausencia de coaliciones sociales que permitan construir planes, programas y proyectos sobre desarrollo local y plantear proyectos territoriales de horizontes a largos años. Resalta en especial la debilidad del gobierno local que en distritos con espacios rurales de la sierra deberían tener un rol protagónico. Actualmente nuestro país, el territorio se encuentra fuertemente fraccionado en un número muy grande de espacios político-administrativos (municipalidades distritales), cada uno de ellos con una escala muy pequeña y con poca capacidad para cubrir los costos fijos necesarios para actuar como contrapartida eficaz en proyectos liderados por el gobierno regional o provincial o por las ONGs. el presupuesto municipal per cápita es sustantivamente bajo. La debilidad de las municipalidades distritales se debe a tres factores coincidentes: (i) la limitación presupuestal, (ii) la ausencia de personal capacitado para la gestión de los recursos (debido a (i)), y (iii) la supervivencia de un enfoque de la gestión municipal que privilegia las obras físicas. Aunque se trata de un problema reconocido por todos, revertir esta fragmentación es virtualmente imposible. Muchos de los centros poblados fueron creados en época colonial y fueron convertidos en distritos en los primeros tiempos de la República. Otros son producto de la progresiva desagregación de distritos mayores , en el contexto de los años 60 y 70, cuando se intensifica la lucha por el control de los recursos entre comunidades y hacendados. En este contexto, una estrategia clave es lograr financiamiento sustantivo y planeamiento con enfoque de cuenca, consiste en la asociación de municipalidades en torno a proyectos u objetivos comunes. De esta mancomunidad de distritos se debe avanzar en estudios técnicos que permitirían (en caso que se logre articular de manera sostenible a los actores del territorio) viabilizar proyectos de desarrollo con enfoque territorial. A estas limitaciones es importante añadir la falta de planeamiento de largo plazo de las municipalidades distritales. Aunque recientemente la Ley de municipalidades ha hecho obligatorio que los municipios distritales tengan planes a mediano plazo (en la actualidad hay planes aprobados hasta el 2015), apenas unos pocos planes distritales son de razonable calidad, según los testimonios recogidos. Aquí, es la necesidad de elaborar planes de calidad con enfoque territorial.