viernes, 15 de junio de 2012

PROBLEMA DE LA ADMINISTRACIÓN DEL TERRITORIO POR UN GOBIERNO LOCAL

Un alto grado de fragmentación político-administrativa, que dificulta la gran inversión pública y el manejo territorial con enfoque de cuenca. La ausencia de instituciones y actores sociales que regulen el acceso y uso a los recursos naturales, así como la ausencia de coaliciones sociales que permitan construir planes, programas y proyectos sobre desarrollo local y plantear proyectos territoriales de horizontes a largos años. Resalta en especial la debilidad del gobierno local que en distritos con espacios rurales de la sierra deberían tener un rol protagónico. Actualmente nuestro país, el territorio se encuentra fuertemente fraccionado en un número muy grande de espacios político-administrativos (municipalidades distritales), cada uno de ellos con una escala muy pequeña y con poca capacidad para cubrir los costos fijos necesarios para actuar como contrapartida eficaz en proyectos liderados por el gobierno regional o provincial o por las ONGs. el presupuesto municipal per cápita es sustantivamente bajo. La debilidad de las municipalidades distritales se debe a tres factores coincidentes: (i) la limitación presupuestal, (ii) la ausencia de personal capacitado para la gestión de los recursos (debido a (i)), y (iii) la supervivencia de un enfoque de la gestión municipal que privilegia las obras físicas. Aunque se trata de un problema reconocido por todos, revertir esta fragmentación es virtualmente imposible. Muchos de los centros poblados fueron creados en época colonial y fueron convertidos en distritos en los primeros tiempos de la República. Otros son producto de la progresiva desagregación de distritos mayores , en el contexto de los años 60 y 70, cuando se intensifica la lucha por el control de los recursos entre comunidades y hacendados. En este contexto, una estrategia clave es lograr financiamiento sustantivo y planeamiento con enfoque de cuenca, consiste en la asociación de municipalidades en torno a proyectos u objetivos comunes. De esta mancomunidad de distritos se debe avanzar en estudios técnicos que permitirían (en caso que se logre articular de manera sostenible a los actores del territorio) viabilizar proyectos de desarrollo con enfoque territorial. A estas limitaciones es importante añadir la falta de planeamiento de largo plazo de las municipalidades distritales. Aunque recientemente la Ley de municipalidades ha hecho obligatorio que los municipios distritales tengan planes a mediano plazo (en la actualidad hay planes aprobados hasta el 2015), apenas unos pocos planes distritales son de razonable calidad, según los testimonios recogidos. Aquí, es la necesidad de elaborar planes de calidad con enfoque territorial.